martes, 16 de noviembre de 2010

Perséfone


Te condenas, como ella, que tan sólo probó unos granos de la suculenta granada que Hades le ofrecía, lo hizo por las prisas de salir de esa situación que le angustiaba, no lo pensó...
Ahora toda su vida tendrá que pasar una larga época en el inframundo, siendo la reina eso si, pero sin disfrutar de la claridad del sol, de la tierra fértil y de los placeres que más le agradan en la superficie.
Ahora su vida se divide en estaciones, en épocas, en temporaas. Ya no es libre, ahora carga con su error.

Por suerte, en el mundo de los humanos no sucede lo mismo, todo está en nuestra mano...